Es mucho más real que cuando estrenamos calendario anual, pues a principios de enero no siento tantas emociones e ilusiones por lo que se avecina como cuando comienza septiembre.
Quizás esta sensación esté directamente relacionada con mi profesión, pero creo que va mucho más allá... se remonta a los años de colegio como alumna, a mi infancia.
No estoy hablando de un caso aislado, me consta que a muchas personas les ocurre lo mismo. Es por ello que después de tantas semanas sin escribir en este blog quisiera comenzar compartiendo mi mejor deseo para este curso para todos vosotros.
Imagen realizada con la aplicación Notegraphy
Elijo la figura del tótem cómo símbolo de protección y de pertenencia. Nos avecinan tiempos de esfuerzo profesional que sin duda nos harán poseer una historia común.
A priori mi visión es esperanzadora; tengo grandes ilusiones. Espero que las cosas, aunque con mucho esfuerzo, se van a hacer bien porque tenemos un grandísimo potencial.
En cuanto nos pongamos manos a la obra dejaremos a todos con la boca abierta.
No digo más, ya veremos. :)
Yo desde que soy pequeña también siempre tengo una sensación muy parecida a la tuya con cada comienzo y cada vez se vuelve más fuerte.
ResponderEliminarGracias por tus buenos deseos siempre llenos de grandes sensaciones, ilusiones, alegría, y un positivismo infinito que anima a cualquiera.
Yo también te deseo los mejores deseos para esta nueva etapa.
PD: tu nombre debería ser el de "felicidad" porque siempre es lo que más transmites y das a la gente. =)